Trea, Gijón, 2020, 36 págs.
El amor llena el día de momentos cruciales.
Las palabras son piedras pero fueron pájaros.
Demasiada gente pregunta desde la respuesta.
El perdón como arma de construcción masiva.
No hago nada: me ocupo de la importancia.
Todos los días son mi primer obstáculo.
Nadie agradece la luz si no ha estado a oscuras.
No para escaparme de la realidad: escribir para que la realidad no se me escape.
Nunca se vive en orden cronológico.
Cada vez me cabe más vida en la palabra ayer.
La felicidad exige un prójimo.